martes, 26 de julio de 2011

Cre-do

Mi credo no tiene santos

Ni Chaplins o salmos responsoriales.

Es más, no sé si es un credo

                        [los credos sólo son de los que creen en algo y yo, cariño, no creo en nada]

Pero doy prueba de fe

Ciega

del brillo de ojos más tibio de todos los brillos de ojos tibios que he visto

desde el miércoles a las once y media del ochenta y ocho

-una mañana que devoraba tejas-

hasta el roi soleil de hoy

-un día cualquiera del pato círculo y once-

perteneciente

al man escondido detrás de la caperuza metálica.



2 comentarios:

J.M. dijo...

No queremos más Natatropinas ni escritoras de sexta categoría. Hay que aprender a escribir para escribir, mentecata.

J.

Natalia Álvarez Morillo dijo...

¿Qué?