sábado, 31 de diciembre de 2011

Dosmilonce




Coño, 2011, te vas casi sin decirme nada. Te vas sutilmente, eso me gusta. Dosmilonce, te reclamo que me desamparaste muchas veces. Me lanzaste a la mismísima mierda. Me cacheteaste y me dijiste que me levantara, que no fuera tan pendeja, que no fuera tan muchacha bruta. Dejá de llorar, me dijiste, dejá de llorar que eso es pa' los débiles y lo pusiste todo en orden de nuevo. Me enviaste lejos, no tan lejos, pero lo suficientemente lejos para no sentirme en casa. Me lanzaste a la cueva del lobo y me dijiste aprendé, que aquí está lo bueno, y tenías razón. En ese maldito valle está lo bueno, pero no todo lo bueno. En mi pueblo dejo el lago que siempre me llama -somos hijos del lago, los de este gentilicio-, dejo lo importante para cazar otras cosas importantes. Dosmilonce, te llevaste gente. Te llevaste a gente que me importaba, a gente por quien daba la vida. De nuevo, me dijiste que no me preocupara, siempre hay gente nueva y buena y me los pusiste. Esa gente nueva me ha dado sonrisas enormes. Me abriste los ojos a los que siempre estuvieron allí, fieles, y yo los miré y ahora no puedo vivir sin ellos, a pesar de la distancia. Dosmilonce, fuiste arrecho. Fuiste arrecho en todo lo semánticamente posible. Beberé por vos, pensaré en vos y cerraré los ojos.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Resoluciones cumplibles para el 2012



Se supone que en este año que entra se va a acabar el mundo. Se supone que estarás en una celebración, viendo como el reloj marca los últimos minutos del año, bañado en champán o en cerveza -alguna bebida espirituosa, no importa el nivel-, quizás acompañado por tu familia, quizás por amigos, quizás por completos extraños o por tu perro o tu gato, quién sabe. Estarás melancólico por el amor que perdiste el año que muere, la gente que se fue -en Venezuela es tan común esta última-, algún cercano que falleció o que simbólicamente falleció.  Luego de esa celebración cargada de saudade, harás una lista de resoluciones de año nuevo que cumplirás la primera semana y luego dejarás en el olvido, ya que eso de ser mejor persona al ser humano promedio le dura exactamente eso: Una semana, a veces menos. 
En vez de hacer resoluciones incumplibles (No, cariño, no vas a bajar esos 30 Kgs, no te dará el dinero para irte a Buenos Aires como todo el mundo, no vas a ganarte el Kino ni correr un maratón), sugiero unas resoluciones paralelas para aquellos que no creen en las resoluciones de año nuevo:
-Caminar. Sé que el paranóimetro está en sus niveles más altos y prefieres ir a la panadería que te queda a media cuadra en carro, pero no hay nada más desestresante que caminar. Mover las piernas a la acción básica para la que fueron creadas. No tienes que tener una rutina, no tiene que ser en un prado verde. Sólo camina. Muchas de las grandes ideas de este mundo fueron concebidas en una caminata dominical (bueno, al menos, las que no fueron concebidas en el baño).
-Haz algo que nunca harías generalmente, al menos una vez: No necesariamente lanzarte en parapente, tatuarte o teñirte el pelo de morado. Si siempre vas al mismo sitio a tomarte una cerveza, cambia de lugar. Prueba comida picante. Vete un día al mercado chino. Tómate un café en el centro (y hablo de todos los centros de todas las ciudades de este país, tan dejados en el olvido). Explora tu ciudad. Las sorpresas pueden ser bastante agradables.
-No te tomes todo tan en serio. La política, la religión, la música, los libros, la filosofía, los carros, el fútbol. No te tomes nada tan en serio. Te librarás de dolores de cabeza.
-No te preocupes si no tienes un camino claro. Muchos que leerán esto estarán en sus 20s, 30s, o 40s y no saben qué hacer con sus vidas. El año nuevo no te dará respuestas mágicas, pero quizás te acercará a lo que quieres hacer. 
-Viaja, al menos una vez. Puede ser a Higuerote, Caimare Chico o a Suiza. Salir de la ciudad que habitas te hará bien. Todos los cambios de aire hacen bien.

Y por último,
-Ama. Si tu corazón se rompió, volverás a amar. Si tu corazón está bien, ama a quienes tengas alrededor. Ama a tus amigos, ama a tu familia, ama a tus mascotas. Amar es bueno para la salud y evita que te salgan canas.


Las sencilleces son más cumplibles. Si tienes metas, qué bueno. Si no las tienes, qué bueno. Vivan y el 2012 será amable en su gran parte. No te crees peos existenciales, déjaselos a la gente rica.


C'est tout.